Rafael Nieto Loaiza |
Fue uno de los cinco precandidatos del uribismo para las elecciones presidenciales de 2018. Y, aunque ya tenía experiencia en la administración pública, no era muy conocido entre la juventud, pues no contaba con un cargo que lo visibilizara, como sí lo tenían tres de sus adversarios en la colectividad (María del Rosario Guerra, Paloma Valencia e Iván Duque); ni tampoco el recorrido político del más veterano de los cinco: Carlos Holmes Trujillo. Muchos le achacaban a él la demora del partido Centro Democrático en escoger a su candidato único para las elecciones cruciales de ese año: “solo los uribistas deben participar en la escogencia del candidato de nuestro partido”, insistía entonces.
Se trata de Rafal Nieto Loaiza,
un abogado hijo del expresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos
(CIDH, muy de moda por estos días en Colombia), Rafael Nieto Navia y María Teresa
Loaiza Cubides. Tiene estudios en derechos humanos y derecho internacional humanitario.
En 2003 se posesionó como viceministro del interior y de Justicia, cargo en el
que duró nueve meses, ya que quien lo había nombrado (el ministro Fermentando Londoño
Hoyos renunció y Nieto Loaiza tuvo desacuerdos marcados con su reemplazo, Sabas
Pretelt de la Vega.
“El distanciamiento
Pretelt-Nieto se debe a varias razones: a la aceptación del ministro a reunirse
con abogados de extraditables, a la propuesta de empadronamiento general hecha
por Nieto en la reglamentación del Estatuto Antiterrorista y a la redacción del
proyecto de reforma a la justicia, en la que no participó el viceministro,
entre otros puntos”, informó El Tiempo el 9 de marzo de 2004. “Cuando hay
diferencias entre el ministro y el viceministro, el que se tiene que ir es el
viceministro”, dijo en esa oportunidad Rafael Nieto.
Al año siguiente, en una de sus columnas en el mismo diario, el político uribista criticó el que el gobierno del presidente Álvaro Uribe no les hubiese otorgado asilo político a diez militares de Venezuela que, presuntamente, en abril de 2002, habrían promovido un golpe militar contra el entonces presidente del vecino país, Hugo Chávez, sacado del poder, en esa oportunidad, por 47 horas. Para Nieto Loaiza, el pedido de refugio de los militares venezolanos no fue resultado de la intentona golpista sino que los militares fueron absueltos por el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela de los cargos que se les imputaban. “Entonces, el gobierno de Chávez decidió enjuiciarlos de nuevo por los mismos hechos por los que habían sido declarados inocentes”, puntualizó.
¿Será
candidato presidencial en el 2022?
El Centro Democrático no ha
concretado aún el mecanismo para escoger su candidato a la presidencia de
Colombia. Lo cierto es que ya suenan algunos nombres para aspirar a la bendición
de esta colectividad: las senadoras Paloma Valencia y María de Rosario Guerra,
que volverían a repetir precandidatura; los también senadores Carlos Felipe Mejía
y María Fernanda Cabal; últimamente, se ha mencionado a Óscar Iván Zuluaga, que
ya había perdido las elecciones en segunda vuelta frente a Juan Manuel Santos;
y, por supuesto, vuelve a sonar Rafael Nieto Loaiza.
Si el asunto se arreglara continuando la “línea de mando” de las precandidaturas del 2018, le
tocaría a Nieto Loaiza, pues los tres primeros en las encuestas (el mecanismo que, finalmente, se escogió para definir el candidato del partido de ese año) de ese momento fueron: Iván Duque, que resultó escogido, con un 29,47%; Carlos Holmes Trujillo obtuvo el 20,15%; y Rafael Nieto, el 20,06%. Como se sabe, Holmes Trujillofalleció siendo ministro de Defensa del actual gobierno.
En una entrevista radial, en
marzo de este año, Rafael Nieto dijo que él creía “que estas elecciones
próximas van a hacer unas elecciones de alianzas, creo que no hay ningún
partido o candidato que solo pueda llegar con éxito a ganar la Presidencia de
la República”; por eso, es un gran impulsor de una Gran Alianza Republicana, que involucre a todos los sectores de la centro derecha. En ese sentido, no hay que olvidar que el mismo ex presidente
Álvaro Uribe Vélez, jefe natural del Centro Democrático, se ha reunido con distintas
personalidades de centro derecha, que tienen cierto arraigo entre electorado,
como Federico Fico Gutiérrez, ex alcalde de Medellín; Álex Char, ex alcalde deBarranquilla y Dilia Francisca Toro, ex gobernadora del Valle.
Rafael Nieto Loaiza es un convencido
de que “de que no hay sociedad civilizada sin autoridad, orden y seguridad. No
basta con eso, estoy de acuerdo. Son condición necesaria pero no suficiente.
Pero sin ellas solo hay caos, anarquía, barbarie”, como lo ha escrito en sus
columnas de opinión y en sus redes sociales. Esa insistencia suya en la “autoridad,
orden y seguridad” le ha ganado el epíteto de “duro” dentro de su partido. Lo
verdadero es que se ha mantenido coherente con sus ideales y no los ha traicionado
de acuerdo a la moda y al vaivén de las circunstancias políticas del momento: a
mi modo ver, eso habla bien de una persona.
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