14 oct 2025

Anibal Martínez, ‘el negro del Cañaguate’ que se quedó en el corazón de la gente


Por John Acosta

Esa mañana de octubre, el río Guatapurí bajaba caudaloso, como lo hacía siempre por los aguaceros de esta época del año. Aníbal Rafael Martínez Zuleta, ya conocido como ‘El Negro grande del Cañaguate’, no desperdiciaba día en Valledupar sin darse el gusto de pegarse su baño diario en el gran afluente de la capital del Cesar. En esa oportunidad, había un invitado especial de fuera de la ciudad: Álvaro Uribe Vélez, que aspiraba a ser presidente de la República en las elecciones de 2002. Los acompañaba un pupilo de Aníbal Martínez: Víctor Martínez Gutiérrez, quien apoyaba al contrincante de Uribe dentro del Partido Liberal, Horacio Serpa Uribe. “Tenga cuidado con las piedras. Mire que el río está bravo”, le advirtió Martínez Zuleta al entonces candidato presidencial. “No se preocupe: yo sé de ríos”, le respondió Uribe y se lanzó al agua. La fuerza del río terminó arrastrándolo un poco, lo que aprovechó Víctor Martínez para tirarle un sablazo al oponente de Serpa: “Eso le pasa por irse contra la corriente”, le dijo a Uribe. Muerto de la vergüenza por la impertinencia de su alumno, Aníbal Martínez lo recriminó con su mirada inquisidora. “Fue como diciéndome ‘¿cómo se te ocurre decir eso, Víctor?’”, le contaría el pupilo al semanario La Calle. Entonces, Álvaro Uribe salió chorreando agua por su cuerpo, miró a su joven interlocutor y le respondió: “Ya le entendí, pero dígale a su amigo que yo soy como el bambú: aunque me doble, no me tuerzo”.