Por María Robles y Laura Villa
El jueves 19 de noviembre del presente año, se realizó la conferencia Fronteras Éticas y Legales del Comunicador: en busca de una ley que regule la profesión, donde los principales ponentes fueron el actual Senador por el partido Cambio Radical y abogado, Richard Aguilar Villa y el comunicador social, periodista y magíster en Educación, Alberto Martínez Monterrosa. El evento estuvo dirigido por el comunicador social y periodista con estudios en maestría en Ciencias de la Comunicación, John Acosta Rodríguez y fue organizado por el Departamento de Humanidades de la Universidad Autónoma del Caribe. Con la asistencia de unas 60 personas, entre estudiantes, periodistas profesionales y profesores de otras universidades, el evento se convirtió en un espacio donde los exponentes dieron las razones por las que luchaban para que se apruebe una ley que acepte el Periodismo como una profesión y no como un oficio.
Richard Aguilar, senador |
se proponía que se aceptara la profesión de Periodismo y se dictaban otras disposiciones; sin embargo, la ley tuvo que ser archivada. En este evento, el senador sostiene que la principal razón por la que no se concretó esta ley fue porque hubo muchos desacuerdos entre el gremio de periodistas. “Este proyecto de ley generó problemas porque muchos medios no lo entendieron y pensaban que íbamos a exigir la tarjeta profesional. Entonces, muchos profesionales de diferentes ramas, pero no de periodismo y que están ejerciendo el periodismo en grandes medios, tanto radiales como televisivos en la región, pensaron que íbamos a pedir la tarjeta profesional; por eso, tuvimos que hacer claridad. Pero tergiversaron el mensaje y eso creó un bloqueo para el proyecto”, explica el senador.
Siguiendo la misma
línea, Aguilar manifiesta que “en la última ponencia para el segundo debate,
decían que el periodista es diferente al comunicador social y como se puede
confundir con el ejercicio de periodista, entonces, decidimos sacar la
comunicación social de la ley y dejamos el periodismo en sí”.
El proyecto de ley 234
de 2018 es más antiguo que el del senador y fue apoyado por la Asociación de
Facultades de Comunicación de Colombia, Asfacom. Alberto Martínez Monterrosa
era presidente de esta asociación y fue un impulsor de este proyecto, por medio
del cual se reconocía la profesión de Comunicación Social y periodismo, pero,
al final, no llegó a definirse. Después de muchos debates, escuchando nuevas
propuestas del gremio, proceso liderado por el senador Aguilar, se planea proponer,
en marzo de 2021, un nuevo proyecto de ley para regular el periodismo como
profesión.
Profesionalizar a periodistas empíricos y a la profesión
misma
Un factor en el que hay
que dirigir la mirada es a los periodistas empíricos, los cuales representan
una gran cantidad en el gremio, y, efectivamente, van a oponerse al proyecto
porque piensan que este los perjudicaría. Con relación a eso, Aguilar dice,
“Las personas que hayan ejercido el periodismo de una manera empírica por más
de 15 años, se les puede otorgar esa credencial como profesionales del
periodismo, después de una homologación, en donde se puede trabajar con la
academia y una ley que reglamente cómo se les otorgaría esa credencial.”
También se manejó el
tema del pueril salario que les corresponde a los periodistas profesionales,
que, a pesar de estar preparados y contar con el aval de tener una carrera
profesional, reciben un sueldo por debajo de lo correspondiente. Es un
conocimiento colectivo que los periodistas no tienen un sueldo justo y que, por
tratar de sobrevivir a la situación del país, desvalorizan su trabajo por el
pago que estén dispuestos a dar los medios. Todavía no hay una solución visible
para ese problema, pero se espera que, si se pueda aprobar la ley, se tenga en
cuenta que “se necesita un Concejo profesional para tener interacción con el
gobierno, las diferentes instancias e instituciones del gobierno nacional para
poder reglamentar el salario de los periodistas”, explica el senador Aguilar.
Alberto Martínez, académico |
Tanto Aguilar como Martínez aclaran que su objetivo con la regulación de estas leyes es que el periodismo sea profesionalizado, no sea un oficio que cualquier persona que desea dar su opinión abra un canal o espacio en internet y, por consiguiente, sea denominado como periodista. La finalidad de dicha ley no es imponer la tarjeta profesional; simplemente, busca la manera de que la ley incluya al Periodismo como profesión para que los que la ejercen tengan protección por ser de alto riego, prestaciones y todos los beneficios que entran en el paquete de ser considerado por la ley colombiana como profesionales. Lo que se busca, en últimas, es dignificar la profesión del periodista.
“Ahí partimos de tres
premisas fundamentales para tratar de hilvanar la discusión. La primera, que el
periodismo se reconozca como una profesión, más que como un oficio. En segundo
lugar, que se aparte de la comunicación social, no porque no tiene qué ver,
sino porque ya la comunicación está reglamentada, lo que necesitaba
reglamentación es el periodismo. Lo tercero es que hay que dignificar las
condiciones del periodista porque, evidentemente, lo que hoy tenemos en el
mercado son salarios bastantes bajos, competencia muy fuerte con otras
profesiones, que están, digamos, tomándose la órbita del periodismo”, explicó
Alberto Martínez Monterrosa.
El senador Aguilar
extendió una invitación a los estudiantes de Comunicación Social y Periodismo
de la universidad para que apoyaran la menciona ley en marzo de 2021, cuando
sea propuesta, ya que, con ayuda de las redes y de los mismos estudiantes, se
puede crear una fortaleza que se manifieste, luche por la profesión que están
cursando, obtengan los beneficios y no sientan que perdieron el tiempo y dinero
estudiando una carrera que las entidades judiciales creen que puede ejercer
cualquier individuo.
Aclarar los densos y oscuros senderos
John Acosta, moderador, y el senador Richard Aguilar, en pleno conversatorio virtual |
estamos: unas circunstancias sobrevinientes de una tecnología avasallante, que nos plantea distintos escenarios de comunicación y de información; en medio de todo esto, hay muchísima confusión entre la opinión pública. “No sabemos quién es el periodista, cuál es el medio de comunicación, si finalmente las redes sociales, por ejemplo, son medios convencionales de información o si son fuentes de información, si quienes ejercen allí son influenciadores impulsados por la vanidad, por un interés político, por un interés económico o acaso por el interés de informar debidamente a la ciudadanía”.
Para Martínez, ese tipo
de confusiones no le hacen bien a la sociedad. “Hay la necesidad de decantar
para tratar de aclarar los senderos, que continúan un poco densos y oscuros”. Agrega
que es natural que aparezcan temores en las asociaciones de periodistas:
algunas apoyan el proyecto, otras no, por el temor de que, de repente, se fuera
a censurar el ejercicio libre de la profesión. “Y, por otro lado, están también
las grandes organizaciones mediáticas, temiendo que, a lo sumo, se fuera a
reglamentar lo que, desde su óptica, es propio de la libre iniciativa privada,
en términos, por ejemplo, de contratación, de salarios los periodistas”.
La participación del público asistente
John Acosta y Alberto Martínez, en el conversatorio virtual |
Dagoberto Mata Daza, comunicador social-periodista, redactor del Diario Hoy Magdalena: “Lamentablemente, hoy, cualquier persona que tenga un celular, monta una página y ejerce el periodismo sin ningún fundamento, sin ética profesional: yo los llamo desguasadores del periodismo. Lo vivo constantemente en el departamento del Magdalena, en donde, en cada municipio hay un portal, que lo que hacen, en muchas oportunidades, es denigrar la profesión. Y a esto hay que darle solución. A veces, uno como profesional va a cubrir un hecho a uno de estos municipios, y lo ven mal porque ya tienen un concepto negativo de la profesión por culpa de estas páginas web. Lo peor es que, muchas veces, estas personas que ejercen el periodismo sin ir a una academia, reciben mejores ingresos que quienes fuimos formado en una escuela de comunicación”.
Joyly Karina Torres González,
comunicadora social-periodista, comunicadora escolar en Cafam: “Debe buscarse
acuerdos también desde la academia porque los profesionales salimos de una
universidad y allí es donde convergemos todos: comunicadores docentes,
estudiantes de periodismo, futuros profesionales. Allá debe buscarse consenso
también para este nuevo proyecto de Ley porque las asociaciones cada una tiene
sus reglas, pero escuchar a los nuevos comunicadores es importante para crear
una ley que nos mejore la calidad de vida a todos, pues esta es una profesión
de alto riesgo, ya que nosotros nos metemos en la boca del lobo y ponemos en
riesgo nuestra integridad personal y la de nuestras familias”.
Los asistentes al conversatorio virtual |
evento. Karen Ordóñez, comunicadora social-periodista, ejerce como comunicadora organizacional en la empresa Triple A, de Barranquilla: “Qué buen encuentro y respaldo a una profesión respetable e importante para la sociedad, la cual debe caracterizarse por la responsabilidad y profesionalismo. Con este tipo de conversatorios, liderados por ustedes, sigo reconfirmando mi orgullo de ser egresada de la gran universidad Autónoma de Caribe, mi casa”.
Los estudiantes de
comunicación también se manifestaron: “Excelente”, dijo José Effer Lyons. “Estuvo súper”, opinó Keterin Vásquez “Me encantó. Gracias por planificar este
evento”, expresó Omar Villarreal “Muy
enriquecedor. Despejó bastantes dudas”, puntualizó María Robles. “Bastante
interesante. Gracias por el espacio”, dijo María Patrón. “Muy, muy interesante”, opinó Kathy Salas.
“Genial, gracias por el espacio”, expresó Karolay Figueroa.
Marlene Burgos: Sin duda es un crécele te articulo y sobre todo una muy buena ley, en lo personal estoy totalmente de acuerdo con ella. Esta profesión debería ser tomada más en cuenta muchas veces he sentido que no se está categorizando en la manera que debería, ahora con el auge de la tecnología cualquier persona tiene al alcanza crear un portal web y fácilmente ser llamado perdiosta y realizar todo tipo de actividad relacionando con ello y en muchas ocasiones esas actividades no son realizadas de manera adecuada y aunque lo fueran no es justo a mi parecer que algunos tengan que pasar 5 años de su vida estudiando una carrera, especializándose para que luego alguien aparezca sin ningún título y solo con un conocimiento empírico a realizar algo que resulta tan comprometedor y difícil.
ResponderBorrarY si hablamos de la remuneración salarial es algo que resulta un poco triste, esta profesión no es bien pagada y no debería ser así porque es igual de complicada que cualquier otra e incluso hasta riesgosa; como periodistas deberíamos ser tomados más en cuenta; puntualmente cuando hacemos prácticas o pasantías en algún medio de comunicación ni siquiera nos reconocen algo y estamos gastando tiempo, aprendizaje y esfuerzo. Muchas veces he tenido el pensamiento de que si debería cambiar de carrera y creo que ese miedo surge por el panorama que se nos presenta en este mundo del periodismo y no debería ser así porque aquí nosotros entregamos mucho, esto es hecho con amor y dedicación lo más Justo sería tener un salario digno. En cuanto a la iniciativa de utilizar las redes para promover el apoyo hacia la ley me parece estupendo debemos utilizar todos los mecanismos posibles para ser mayoría, la tecnología hoy por hoy es un fenómeno impresionante que si lo sabemos utilizar para cosas buenas nos puede llevar muy lejos.
Por: Maria G García.
ResponderBorrarLa comunicación al ser una interdisciplina esta sumergida en los diferentes trabajos y profesiones del ser humano.
La comunicación social como profesión avala diferentes campos de la comunicación, pero desligada del periodismo; allí entran disciplinas sociales, culturales y económicas más para un análisis interno y externo de la comunidad en una empresa, un mercado o en la vida diaria.
El periodismo como profesión va ligado a la redacción y formas de brindar una información de interés público hacia toda la sociedad pero cumpliendo una series de normas que se estipula para ejercer esta profesión.
El problema es que la comunicación social si tiene una ley que la avala como profesión y regula a quienes ejercer esta labor, pero el periodismo no lo tiene y al no tenerlo cualquier persona infortunadamente puede realizar las labores que hace un periodista y puede considerarse uno. Al hoy en día contar con varias tecnologías que permiten la difusión de la información en el que hoy las personas los consideran periodistas.
En algún momento debe ser justo y necesario que se protegan los derechos laborales dignamente de la Comunicación Social y el Periodismo. Por ello, estoy totalmente de acuerdo con esta ley porque es Justo y necesario aprobarla a parte de esto el punto de la remuneración salarial en esta profesión también es un aspecto preocupante; para ninguna persona es un secreto que está carrera no es bien pagado, muchas veces nuestro trabajo es denigrado y desvalorizado a tal punto que no ganamos lo que deberíamos y esto genera un descontento en nosotros.
En conclusión hay muchísimas cosas por mejorar y sin duda este artículo supo reunirlas y plasmarlas y sobre todo crear soluciones que resultan apropiadas.